La decisión de llevar a cabo esta protesta extrema fue tomada durante la III Asamblea Nacional de Delegados del SUTEP en Lima. Los dirigentes del sindicato expresaron su frustración tras no recibir respuestas satisfactorias del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y del Ministerio de Educación (Minedu) respecto a las peticiones del magisterio. Los docentes exigen que el Gobierno Central incremente el presupuesto para educación al 6 % del Producto Bruto Interno (PBI), con el fin de atender necesidades urgentes en infraestructura, alimentación y salud dentro de las instituciones educativas.
Lucio Castro Chipana, secretario general del SUTEP, destacó que el incumplimiento de compromisos anteriores está afectando directamente los sueldos de los maestros, auxiliares y otros empleados del sector. El SUTEP ha reiterado que, de no obtener una respuesta adecuada para el 30 de agosto, se considerará una huelga general en septiembre. Esta decisión dependerá del envío por parte del MEF de un proyecto de presupuesto al Congreso que incluya los acuerdos firmados con el Minedu.
También, Maruja Leyzaquía, secretaria de Equidad y Género del SUTEP, señaló que la huelga magisterial anunciada, busca visibilizar la indiferencia del gobierno hacia los problemas del sector educativo. Además, criticó a la presidenta Dina Boluarte por no abordar las preocupaciones del magisterio en su discurso del 28 de julio y por la falta de consideración hacia los docentes jubilados.
La huelga de hambre, que tendrá lugar en varias regiones del Perú, también busca presionar al Gobierno para que cumpla con sus obligaciones constitucionales y garantice una mayor inversión en el sector educativo. El SUTEP responsabiliza al gobierno y al MEF por cualquier consecuencia que pudiera surgir debido a esta medida de protesta.
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